Cuando la vida nos da lecciones de cambios drásticos como una enfermedad, la muerte de un ser querido, la partida de alguien cercano al exterior, es cuando realmente te percatas de las cosas importantes y de las vanales.
Como todo cambia en un minuto, ese gran problema en la oficina, los exámenes de mañana, la avería del carro, la deuda de navidad….. Eso, también pasará. Así que asegúrate de tomarte tu tiempo para respirar. Un respiro grande y profundo, sin prisas. Veras los resultados al rato, te sentirá mejor y veras las cosas desde su justa dimensión.
Si te tomas un largo minuto para respirar, acompañalo con un café. Yo ya lo hice. Un rico mocacino y unos minutos para compartirlo con mi blog.
Nos vemos mañana…. No te olvides de respirar.
Teresa entre Flores